Empieza a contar su experiencia de años anteriores, cuando al cruzar la calle, le alarma un sonido, pero que finalmente es un perro que trataba de llamar su atención. Reflexiona que esto está conectado a los temores que tienen las personas para movilizarse por la ciudad.

En sus experiencias trata de hacer ver que hay muchas cosas por las que agradecer, y que es importante adaptarse a las situaciones, a fin que se pueda seguir creciendo a partir de ahí. Reflexiona que los ciegos tienen una influencia positiva en la ciudad.

Señala que los sonidos le permiten estar ubicado y saber hacían donde moverse y a dónde ir; que puede sentir texturas con su bastón y con el tiempo reconstruir patrones de donde se encuentra. Todas esas son las que llama experiencias multisensoriales.

Cree que las personas tienen un mejor trato hacia los discapacitados que hacia las personas sanas, es su experiencia. Algo muy importante que ha descubierto es que la discapacidad sirve para romper muchas barreras étnicas, sociales, económicas, etc.

Es más inclusivo, incluso desde el diseño mismo de la ciudad, porque si se hace pensando en que hay ciegos en ella, podría generarse una red más ordenada, un equilibrio mejor entre edificios, personas y vehículos, la denominada “ciudad para todos”.